Siempre he encontrado un paralelismo entre el Dr. Vidal y el Dr. Ángel Arturo Aballí. Tal vez porque los dos se dedicaron a la misma especialidad, a la sanación de los niños, o porque ambos compartan el mismo segundo nombre: Arturo. Y así como el mito del Rey Arturo ha pasado a la iconografía popular como sinónimo de inteligencia, honor y lealtad, el Arturo de esta historia es un manantial de enseñanzas. El Dr. Vidal estudió la carrera de Medicina en la Universidad de La Habana.4 Cursó el quinto año y regresó a Matanzas para comenzar las rotaciones hasta que se graduó. Realizó el internado vertical en Pediatría, trabajó en el Hospital de Colón y en el policlínico de Los Arabos. Entre los estudios de posgrado realizados por el Dr. Vidal se encuentran la Maestría en Ciencias de la Educación Superior, Maestría en Infectología y la Especialidad en Segundo Grado de Pediatría.
¿Por qué Pediatría?
Los profesores que tuve influyeron en que escogiera la especialidad en Pediatría. Me gustaba la clínica en general, la cirugía no me gustaba tanto, pero la clínica sí. Algunos de los profesores matanceros que me motivaron mucho: Sergio Álvarez Mesa, María de Jesús Oliva, Jorge González. También debo mencionar a la Dra. Gilda Martínez Furé, de La Habana.
¿Cuáles son sus vivencias como internacionalista?
Salimos para Angola en el año 1976. Supuestamente la guerra en Angola había concluido. Nosotros fuimos la primera brigada civil que fue a trabajar en Angola. Realmente fue una experiencia heroica. Cuando nos despidieron en el aeropuerto, nos explicaron que había muchas probabilidades de que no regresáramos. Íbamos para la zona sur, exactamente en Huambo, lugar muy reaccionario que era donde radicaba Jonas Savimbi, líder máximo de los angolanos en el sur. Tales eran las circunstancias que los trabajadores del hospital pertenecían a la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA). Si las Fuerzas Armadas Populares de Liberación de Angola (FAPLA) te detectaba que tenías un carnet de la UNITA te mataba. Aun sabiendo eso, ellos lo tenían encima por el respeto que le tenían a Savimbi. Sin embargo, era totalmente reaccionario a los intereses que tenía Angola cuando nosotros fuimos allá. Recuerdo muchas anécdotas, pues nunca me imaginé ver niños que morían por tuberculosis o sarampión, ni asistir a niños con parálisis de miembros inferiores debido a la poliomielitis, o atender bebés desnutridos. Desde el punto de vista médico, esto fue una escuela. Nunca pensé que me iba a encontrar con estas enfermedades alguna vez en mi vida. Realmente esto está muy alejado de la realidad cubana. La estancia en Angola marcó mi vida.
¿Cómo valora su entrenamiento en la República Democrática Alemana?
Estuve dos meses de entrenamiento en un hospital pediátrico en Alemania en el año 1986 y fue muy instructivo. Confrontar el desarrollo de Alemania, con lo que yo conocí en Angola fue completamente distinto. Un país socialista en aquel momento con muchas posibilidades de desarrollo, altos niveles de educación y disciplina. Algo llamativo en Alemania, es que no había acompañantes, los niños ingresan solos, los hospitales no tenían guardias de seguridad. Usted sabía que la entrada al hospital era a las tres de la tarde y a esa hora entraba y a las cuatro de la tarde se iba y el niño se quedaba solo con la enfermera y con el médico.
¿En qué año comienza a trabajar en el Pediátrico de Matanzas?
Terminé la residencia en el año 1979 y desde esa fecha hasta ahora he estado trabajando en este Hospital Pediátrico porque cuando me gradúo de especialista me quedo aquí. Estuve un tiempo pequeño de Director del Neumológico que era un anexo del Pediátrico. También me vinculé en la Universidad en una etapa de aproximadamente ocho años, allí me desempeñé como vicedecano de la Universidad. Nunca perdí el vínculo con la Pediatría. Yo venía por la mañana, pasaba visita, en la tarde me iba para la universidad y luego, hacía guardia. ¿Cómo considera el trabajo de la Sala Miscelánea, hoy Sala A?Ha sido un trabajo dedicado a atender al paciente y como docente, no se puede desvincular un trabajo del otro. También se puede calificar como un trabajo regular y sistemático, como es lógico superándome. Hoy no soy el mismo, que cuando empecé en el área clínica. Además no basta con el deseo de ser docente o tener ciertas aptitudes para la docencia. Tienes que utilizar un grupo de herramientas que si no las tienes, se hace muy difícil. Uno tiene que dominar conocimientos de didáctica, de pedagogía, de metodología de la investigación, sino te quedas detrás.
¿En qué consiste el método clínico?
El método clínico es la aplicación del método científico en el trabajo con el paciente. Por eso a veces, uno no concibe que un estudiante que termine la carrera de medicina no sea capaz aún sin conocer metodología de la investigación, de enfrentar un problema científico.
Cuando tienes un paciente, que lo ves por primera vez, y aún no conoces el diagnóstico, lo primero que como médico debes hacer es analizar su situación problémica y extraer lo más importante; hacer un resumen sindrómico. Vas de lo singular del paciente a lo particular. Esto con el objetivo de reducir las posibilidades diagnósticas.De ahí llegamos al diagnóstico presuntivo que no es más que la hipótesis de una investigación. Es entonces cuando comienzas a buscar las vías de cómo confirmar el diagnóstico. En este momento comienzas a preparar los exámenes complementarios que te llevará a confirmar o no el diagnóstico. Una vez confirmado el diagnóstico tienes dos caminos: comunicarlo en el colectivo de trabajo y por otra parte, si es un caso interesante, lo publicas. Resulta muy contradictorio que alguien se gradúe y que no sepa enfrentarse a un problema científico, porque eso te da la idea de que durante su etapa de formación esto no se interiorizó, lo vio desde lo externo y por lo tanto le cuesta más trabajo. También puede ser que se vaya adquiriendo esta forma de trabajo, en la medida que estudies la metodología de la investigación.
Método clínico, se puede definir hoy como ciencia con eficiencia. Es decir, aplicando el método científico, logres llegar al diagnóstico de la entidad y tratar al paciente con los menos recursos posibles, pues utilizaste un método adecuado. Si logras interiorizar eso, cuando eres estudiante de medicina lograste uno de los objetivos fundamentales en la formación, de lo contrario, terminas la carrera de medicina, te haces médico, pero con un grupo de deficiencias importantes. También se puede ir ganando con los años de trabajo, pues cualquier graduado universitario necesita la superación y el estudio constante.
¿Qué ha significado la Dra. Xiomara Casals para usted?
Estudiamos la carrera juntos y en cuarto año regresamos a Matanzas. Xiomara hace Microbiología y yo hice Pediatría. Hace unos días cumplimos 50 años de casados. Tenemos una familia muy bien estructurada.
¿Qué le gusta leer a Vidal?
Me gusta leer autobiografías de personajes importantes de la historia y soy lector de todo lo que sea bueno o mejor dicho, que yo considere bueno.
¿Qué películas le gustan?
Me gusta mucho el cine cubano, primero porque uno de sus objetivos esenciales es recrear y pasar un buen rato. El cine cubano permite al público dar diversas lecturas y llegar a la esencia de lo que quiere el director o el guionista. Hay películas clásicas, que marcan un antes y un después. Este el caso de Fresa y Chocolate y muchos otros filmes de esa época que están comprometidos con la realidad cubana.
¿Qué virtudes valora más en las personas?
Responsabilidad, honestidad, la amistad. Esas amistades que se forman a lo largo de la vida, que aunque se ven poco, pero un día se ven y siguen siendo las mismas personas, porque están ahí, tú sabes que están. Los vínculos familiares te tocaron, sin embargo la amistad es otra cosa, tú la buscaste, llegó y te comprometiste con esa persona de una manera sin tener en cuenta sus ideales, su posición política. Tú puedes tener una posición política diferente a la mía y sin embargo, ser mi amigo, ahí entra la diversidad, aceptar la diversidad porque si no se acepta la diversidad, no puedes entender muchas cosas.
¿Qué le gusta hacer en el tiempo libre?
Leer, seguir estudiando, eso forma parte de uno, es muy difícil desvincularse del estudio constante y también me gusta ver la televisión, el cine o el teatro.
¿Por qué Vidal no se ha ido de Matanzas? Aunque pude irme de Matanzas en varios momentos decidí quedarme, pues aquí nací, aquí hice a mi familia y aquí debo terminar mis días.
¿Hablemos un poco de los valores?
Con sentimientos de miedo, culpa, poder y apego se fue formando la humanidad. Al carecer de conocimientos, el miedo se convertía en la esencia. Desgraciadamente el hombre se desarrolla pero sigue con ese tabú. El sistema con que se educa a los hombres es partiendo del miedo, de la culpa y aplicando el poder. A cualquier nivel, a familiar. La familia lo utiliza, pues no conoce otro método. Los valores cuando los aprendes son externos, son valores formales. Estás en la dicotomía de ser sancionado cuando haces algo o te corroe la culpa por determinada actitud. El valor se convierte en un valor formal, externo, compulsivo. Para que el valor sea por convicción tiene que estar en armonía el sentido personal, lo afectivo y lo cognitivo. Lo que yo piense, coincida con lo que yo siento, y con lo que yo hago. Cuando esa triada se rompe, el valor funciona externamente y no existe armonía, pues estás haciendo algo diferente a lo que sientes y a lo que piensas. Cuando el hombre rompe con el miedo, sencillamente es libre. Esta es la esencia de la incorporación de los valores porque de lo contrario, se queda externo. La única manera de enfrentar estas contradicciones es educar con amor. Un profesor que no respete el criterio de sus estudiantes y piense que con tener el poder va a imponer el respeto está perdido. No puedes ser el único que tiene la razón. El estudiante es libre de decir lo que siente. El estudiante debe pensar no con el pensamiento lógico formal, sino como una unidad dialéctica, en sistemas. De lo contrario es un pensamiento dogmático. Con los estudiantes se aprende todos los días. Si no se logra eso, no se logrará que el estudiante te respete y mucho menos que te quiera. Se convierte en alguien que por compromiso va a tus clases.
¿Cómo ha sido su labor como docente?
Ha sido una labor dedicada a la enseñanza y al aprendizaje de los estudiantes. Siempre he estado vinculado con la docencia desde que era estudiante de medicina. En los años que llevo como docente me he dado cuenta que los estudiantes tienen que ver en su profesor a alguien que piensa, siente y actúa armónicamente de lo contrario es desastroso. Algo fundamental es enseñarle al estudiante a autoevaluarse. Cuando el profesor pide la autoevaluación está formando dos valores: responsabilidad y honestidad. Los valores se aprenden con acciones, no con discursos ni elementos fríos. El profesor debe establecer un diálogo con el estudiante y comprometerte con él.
El Dr. Lázaro Arturo Vidal Tallet es uno de esos hombres con los que uno disfruta conversar. Su experiencia y sabiduría lo convierten en referente obligatorio de la Pediatría en Matanzas. La humildad, carisma e inteligencia para hablar de su vida hicieron de esta entrevista un momento mágico, un encuentro para aprender de ética y valores; por eso sin lugar a dudas el Dr. Vidal es fe de vida.
Es fe de vida, coincido con usted y es algo más, para quienes como discípulos crecimos saciando nuestra sed de conocimientos junto al profesor Vidal, representa un paradigma, cuando más peques respeto, admiración y temor mezclados y luego con la madurez una sensación de Quiero ser como él!!! Gracias profesor!!!
ResponderBorrarGracias a usted por la lectura. Creo que el Dr. Vidal lo merece. Saludos
ResponderBorrarIdea genial de la periodista Carla al entregarnos vivencias y experiencias acumuladas de un profesor de pediatría con gran valor para todos los que nos hemos favorecido de sus enseñanzas .Lo admiro mucho profesor Vidal .
ResponderBorrarPor nada. Creo que el Dr.Vidal lo merece, por sus valores, su sensibilidad y su trayectoria como profesional. Ha sido un placer. Saludos
BorrarGracias por la entrevista y la publicacion de parte de la historia de un gran profesor y ser humano. Fui su alumna hace 30 años y lo recuerdo con admiracion y respeto por su forma de comunicar su sabiduria al estudiante. Muchas gracias merecido reconocimiento a su historia en el hospital pediatrico de matanzas.
ResponderBorrarPor nada!!! Me alegro mucho que le haya gustado. Gracias a usted por leernos.
BorrarGracias por entrevistar a ese grande de la pediatría matancera. Agradezco al profe Vidal haber tenido un cuarto año magnífico al rotar por el Hospital Pediátrico Eliseo Noel Caamaño, pues el con su experiencia nos guió, nos enseñó a materializar y poner práctica el método clínico, a identificar el maltrato infantil y a tratar a nuestros pacientes con el respeto y consideración que merecen. Tuve el privilegio de contar con su consejo de cerca, pues como bien discípulo me cobijé en su sombra y experiencia. Gracias profe en mi nombre y el de mi papá (su pupilo y continuador de sus pasos en tan hermosa especialidad).
ResponderBorrarPor nada Liam!!! Las grandes historias merecen ser compartidas y el Profe Vidal además de ser un excelente profesional es un gran ser humano y amigo. Gracias por tus lindas palabras. Saludos
BorrarOrgullosa de conocer a una persona excepcional..De la cual estoy eternamente agradecida por inculcarme ese inmenso amor hacia la Pediatría y permitirnos aprender un poquito cada día de esta maravillosa especialidad. .Q suerte de poder contar con usted. Mil gracias profe!!!
BorrarProfesor ,amigo ,compañero , ese es nuestro profe Vidal , el ha puesto en muchas generaciones de médicos matanceros no solo conocimientos sino una aptitud ante la profesión, ante el colega y ante el paciente . Puedo agregar dentro de toda esa rica trayectoria que condujo las riendas de la docencia de genética médica en Matanzas cuando fue necesario para orgullo de sus alumnos en los cuales mi persona se incluye .Hay personas en quienes las deudas de gratitud son eternas y enormes en nombre de la medicina.
ResponderBorrarMuchas gracias por sus palabras. El Dr. Vidal merece estos elogios por sus cualidades y virtudes. Saludos
BorrarSon palabras escritas por el dr juan Carlos Perdomo Arrien.,alumno del profesor .gracias .
BorrarOrgullo de la Pediatría Matancera,reconocer a los buenos que han estado al pie del trabajo siempre es muy importante.Muchas felicidades al profesor
ResponderBorrarOrgullo de la pediatría Matancera. Por sus manos han pasado tantos niños y ha enseñado a tantas generaciones de médicos que vale la pena recordar su vida.
BorrarQuerido y admirado infinitamente, merecedor de respeto y inspiraci'on de todos los que tienen la dicha de conocerlo. Muchas gracias a la periodista por este trabajo.
ResponderBorrarPor nada. Fue un gusto y un deber, pues las historias dignas merecen ser compartidas. Saludos
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